Daniel Gómez a la poesía es lo que el polvo de estrellas a la Tierra, fascinantemente cotidiano. Porque la poesía de Ego-Istmos es puente, eslabón, entre una vida acostumbrada a arrostrar los problemas diarios, y la trascendencia del que se eleva para hallar esa palabra exacta y crear con ella belleza. Porque este autor si bien no olvida que su mundo es el de la gente sencilla, tampoco reniega por ello a soñar y crear Arte mediante la escritura exacta.
Ego-Istmos resalta por su combinación de piezas largas caracterizadas por desarrollar sus temas de forma discursiva, con otras piezas pequeñas, casi se diría píldoras para combatir el aburrimiento, y que a veces semejan una suerte de haikus urbanos. Por último, cuenta este poemario con la ventaja de incluir, en algunas piezas, códigos QR que nos enlazarán a video-poemas donde escucharemos la voz del autor en el propio acto interpretativo, y esto junto a la música e imágenes proyectadas provocarán en el lector una intensa e inmersiva recepción estética que le hará gozar de ella de forma total.